El pasado 20 de marzo, se dio a conocer la noticia de un vuelo en el que viajaron importantes representantes de diferentes países, entre ellos Marc Stanley, embajador de los Estados Unidos; Amador Sánchez Rico, de la Unión Europea; Kirsty Hayes, de Gran Bretaña, y Hiroshi Yamauchi, de Japón. También en el mismo vuelo se encontraba Mariana Zuvic, diputada nacional por Santa Cruz de la Coalición Cívica.
Este vuelo, que fue pilotado por el conocido Enrique Piñeyro, ha generado preocupación en Argentina por su posible relación con los intereses británicos en el Atlántico Sur y en particular con la cuestión de la soberanía de las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur.
Según fuentes gubernamentales, se teme que este vuelo sea una maniobra para desacreditar la capacidad de Argentina para proteger sus riquezas en el Mar Argentino y como un intento por parte del Reino Unido de establecer una organización regional de ordenación pesquera (OROP) en el Atlántico Sur, bajo la excusa de preocupaciones medioambientales.
Cabe destacar que el Gobierno argentino ha asegurado que desde 2020 no ha habido intromisión de buques sin permiso en la Zona Económica Exclusiva (ZEE), gracias a un aumento en las multas aplicadas y a las tres capturas de buques que estaban haciendo pesca ilegal durante ese año.
La milla 200 es el límite de la ZEE, y en ella Argentina cuenta con una importante presencia de controles, como 25 imágenes satelitales diarias, dos aviones y buques de la Armada y la Prefectura. El Gobierno capturó en 2020 tres buques en la milla 199, dos chinos y uno portugués, y desde entonces no se han registrado incidentes de cruce ilegal con fines de pesca.
El langostino, que es el principal generador de divisas en el sector y explica más de la mitad de las exportaciones pesqueras, está enteramente dentro de la ZEE, al igual que casi la totalidad de los productos que se ven habitualmente en las pescaderías. Con respecto al calamar, dos de las cuatro especies con las que cuenta Argentina efectivamente salen de la milla 200, pero el país ha liderado acciones internacionales para tratar de mitigar esta situación.
En la OMC se aprobó una limitación a los subsidios económicos que reciben las flotas en alta mar para llevar adelante la actividad de “pesquerías lejanas”, lo que fue acompañado por Estados Unidos, China y Europa. También se estableció restricción a los subsidios para buques que tengan antecedentes de pesca ilegal.
Ante esta situación, es fundamental que Argentina haga valer su soberanía y su derecho a decidir sobre sus riquezas y su futuro como país. La defensa de nuestra soberanía es un tema sensible y de gran importancia para todos los argentinos, y debemos estar alertas ante cualquier acción que pueda afectar nuestros intereses nacionales. No sea cosa que en realidad los calamares seamos nosotros.
Dos notas que valen la pena leer al respecto:
https://www.pagina12.com.ar/533713-el-gobierno-distingue-entre-la-pesca-ilegal-y-aquella-que-se
Y para escuchar, la nota que junto a mi colega Mica Maldonado le hicimos a Alejandro Canio, Doctor en Derecho Internacional especializado en Administración de Espacios Marítimos: https://on.soundcloud.com/2AZC8