

En sintonía y los interese del empresario Rubén Cherñajovsky, dueño de Newsan, el legislador de Republicanos Unidos, Agustín Coto, adelantó que mañana presentará un proyecto de la ley para permitir y fomentar la salmonicultura en el Canal de Beagle.
Para no ser menos y al estilo de su jefe líder espiritual, el incalificable Javier Milei, Coto utilizó la descalificación para los que no piensan como él y justificó su proyecto diciendo que lo hacía por "el desarrollo económico de Tierra del Fuego y del país, y para que ninguna ONG transnacional de hippies con OSDE nos diga ni cómo ni de qué vivir".
Así, el Libertario, y se supone su compañera de banca, Natalia Graciania, se convierten en los primeros legisladores en apoyar la iniciativa que impulsa "il Capo" del Grupo Newsan.
Para resaltar, es el desconocimiento de Coto, sobre la procedencia de los salmones que se sirven en los restaurantes de Ushuaia. "Ese salmón que ves en la carta se tuvo que importar en dólares, porque algunos decidieron prohibir que podamos producirlos nosotros mismos", sostuvo el Legislador en redes sociales y acompañando una foto de un menú.
Cuando la verdad indica, que la mayoría de los salmones que se consumen en los negocios gastronómicos de la Ciudad, son pescados en las desembocaduras de los ríos que vierten sus aguas en el Canal de Beagle, los llamados "salmones salvajes", que tienen origen en las granjas acuícolas ubicadas en las costas del mar Pacífico chileno. De las cuales se escaparon y emigraron a nuestras costas, hace más de 10 años.
Y que hoy, ya representan una amenaza para la fauna autóctona del Canal de Beagle.
La ley 1355, prohíbe el cultivo y producción de salmónidos en aguas jurisdiccionales de la provincia con el fin de “asegurar la protección, preservación y resguardo de los recursos naturales, los recursos genéticos y los ecosistemas lacustres y marinos” de Tierra del Fuego. Asimismo, establece que “el salmón es una especie ajena al medio ecológico austral, cuya aparición causaría un desequilibrio dramático en el entorno marino, particularmente por la aptitud de generar enfermedades virales, parasitarias y bacterianas que no son propias de nuestras latitudes en virtud del enfoque industrial de criadero y su posterior procesamiento”.