

El economista Claudio Lozano, exdiputado nacional y actual presidente de Unidad Popular, cuestionó duramente el plan económico de Javier Milei al considerar que el actual esquema recesivo tiene como consecuencia una fuerte recesión, caída de la actividad y pérdida de puestos de trabajo. En declaraciones al programa radial “el delivery”, Lozano sostuvo que hace falta implementar un programa anti-inflacionario con control de precios y el ingreso de dólares a la Argentina.
Lozano destacó que la estrategia de devaluación y desregulación de mercados implementada por el gobierno ha resultado en una inflación en dólares y un retraso cambiario, exacerbando la falta de dólares en el país. "Acá ha habido un derrumbe monumental de la actividad económica, el cuadro es de una recesión sumamente profunda", explicó.
Según el economista, la eliminación del cepo cambiario bajo estas condiciones llevaría a una devaluación masiva, un nuevo salto inflacionario y una profundización de la recesión, complicando aún más el escenario económico. "El tema de la eliminación del cepo implicaría una fenomenal devaluación. Esa fenomenal devaluación volvería a remarcar precios y la remarcación de precios implicaría por lo tanto un nuevo salto inflacionario, una nueva caída en los ingresos, una profundización del cuadro recesivo", señaló.
El exdiputado también criticó la política de ajuste fiscal, argumentando que es insostenible en un contexto de caída de la actividad económica, ya que disminuye la recaudación y obliga a más ajustes. "Es imposible sostener el déficit cero en un contexto de caída de la actividad porque obliga a ajustar permanentemente", dijo Lozano. También mencionó que el incremento de precios, impulsado por la devaluación y la desregulación de mercados, lleva a una inflación en dólares que desalienta la liquidación de exportaciones y aumenta las expectativas de devaluación.
Lozano sugirió que, en lugar de las medidas actuales, el país necesita un plan integral para controlar la inflación, que incluya la estabilización de un nuevo orden de precios que promueva la producción y la recomposición de ingresos. Este plan requeriría una revisión de la estructura de precios, diferenciando los precios internos de los internacionales, especialmente en alimentos y energía. "Hace falta un plan integral de control de la situación inflacionaria", propuso.
El economista también mencionó la necesidad de un cambio en la política de subsidios y una reforma tributaria progresiva. Insistió en que es fundamental discutir y regular el ingreso de divisas y reconsiderar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que según él, es la trama central del poder en Argentina. "Hay que poner en marcha un programa popular antiinflacionario que implica estabilizar un orden de precios", explicó.
En cuanto a la política actual de Unidad Popular, Lozano criticó la falta de institucionalización del Frente de Todos y la ausencia de una verdadera mesa de discusión post-elección. Afirmó que es necesario hacer política con la gente y replantear las políticas de endeudamiento y distribución del ingreso para abrir una perspectiva diferente y mejorar la situación de la población. "Esa mesa de discusión nunca existió, existió en campaña cuando se abrió la constitución del Frente de Todos", lamentó.
Finalmente, Lozano expresó su preocupación por el posible futuro de Argentina como un país fragmentado en regiones extractivas, bajo la influencia de corporaciones internacionales, si continúa la actual estrategia económica. "Acá hay una amenaza de fragmentación y balcanización de la Argentina. La discusión de fondo es cómo frenar esto", enfatizó. Enfatizó la necesidad de frenar estas políticas y abrir un debate sobre una estrategia de desarrollo que beneficie a toda la nación. "Hay que frenar esta política para abrir una discusión sobre una estrategia de desarrollo para el país", concluyó.